Masa de pizza de Jamie Oliver

Esta es la primera entrada del blog, y estuve dándole muchas vueltas sobre cual era la receta con la que debía comenzar. Como no, para celebrar el nacimiento del blog, venían a cenar a casa algunos amigos, así que me decidí por algo fácil, rico y en lo que todos podían participar: PIZZA.

Hace unos años viajé a Italia y desde entonces he estado buscando alguna pizza que se parezca remotamente a las que comí allí. Había hecho alguna en casa, pero nunca me acababa de convencer la masa, hasta que la respuesta a mi búsqueda llegó las pasadas navidades en forma de regalo: El libro de La cocina italiana de Jamie Oliver.

Desde que el libro llegó a mi no he parado de hacer recetas, todas fáciles y deliciosas, y la masa de pizza también ha estado a la altura, además es fácil y rápida de hacer. Eso sí, mi búsqueda de la masa perfecta continuará

Os animo a hacer vuestra propia masa de pizza. Ver como los ingredientes mas sencillos se convierten en una preciosa masa es satisfactorio, a la vez que divertido (amasar es un poco como jugar con plastilina, puede que tenga efectos rejuvenecedores). Así que, ¡vamos a ensuciarnos un poco!

MASA DE PIZZA

Con las cantidades que vamos a proponer salen unas 6 pizzas. Si quieres hacer menos divide las cantidades en partes proporcionales, pero también puedes congelar las bolas de masa que no vayas a utilizar y así ya tienes masa para otra ocasión.

Ingredientes:

• 800 gr de harina de fuerza
• 200 gr de harina de semolina fina (Con esta harina se consigue el toque crujiente de la pizza. La puedes encontrar a granel en carnicerías o verdulerías árabes y en herbolarios. Si no, añade 200 gr de la harina de fuerza que ya has utilizado)
• 1 cucharada rasa de sal marina
• 14 gr de levadura en polvo (también puede ser levadura fresca, 20 gr puse yo)
• 1 cucharada de azúcar moreno fino (como yo no tenia fino lo pulverice con la thermomix)
• Unos 550 ml de agua templada

Hacemos un volcán con las harinas y la sal sobre la encimera limpia y formamos un cráter en el centro. Disolvemos el azúcar y la levadura sobre el agua templada y dejamos reposar unos minutos (si el agua esta muy caliente la levadura perderá su efecto). Se añade la mezcla dentro del volcán y con un tenedor removemos, mientras vamos incorporando harina al centro hasta que ya este toda integrada. Cuando nos empiece a costar mover el tenedor nos enharinamos las manos y comenzamos a amasar. (También se puede hacer esto  en un bol grande si no se tiene una superficie grande en la que trabajar).

Podemos aprovechar para hacer masa-terapia y descargar nuestro estrés diario sobre la masa estirando, estrujando, golpeando, desgarrando… Cuanto más tiempo se amase mejor el resultado (mínimo 10 minutos).Vamos espolvoreando harina según la vayamos necesitando. Estará lista cuando tengamos una masa suave y elástica y no se nos pegue a las manos. Enharinamos la masa por encima, la cubrimos con un paño limpio y la dejamos reposar como mínimo 30 minutos a temperatura ambiente.

Ahora, dividimos la masa en 6 bolas y empezamos a estirarlas con el rodillo. Para que se estire mejor debemos espolvorear harina a cada rato. La dejamos fina, como de medio centímetro de grosor. Colocamos la base sobre papel de plata engrasado en aceite o con papel vegetal (se vende en cualquier super no hace falta engrasarlo y es comodísimo).

Para hornear la pizza tendremos el horno precalentado a 250º. Cubrimos con salsa de tomate y los ingredientes que más nos gusten y la cocemos unos 10  minutos, hasta que quede crujiente y doradita. Mmmmm. ¡ A comer!.